Estoy impactada con la admirable
historia de Maria de Villota, su ejemplo de superación y su modo de encajar de
manera tan positiva el duro golpe que le dio la vida, su testimonio en
numerosas entrevistas y las muchas imágenes de ella en los medios, siempre con
una sonrisa, sincera abierta y alegre. Un titular comentaba este hecho: “Perdió
un ojo pero nunca perdió la sonrisa”
Desde hace unos meses en mi
departamento hemos implantado un juego que consiste en que cada viernes una
persona envía al resto algo gracioso, un video, un chiste… y tiene que nominar
al que le toca continuar esta cadena la siguiente semana, el asunto de estos
correos es: “sonríe, es viernes”. Hace un par de semanas a la compañera que le
tocaba se le paso enviarlo… supongo que el exceso de trabajo, el caso es que envió
su chiste el lunes y cambio el asunto
del correo, que fue: “Sonríe es viernes, lunes, martes… ¿qué más da? Sonríe siempre!
“ Y es verdad, ¿porque limitarnos nosotros mismos a una cultura de la sonrisa
solo el viernes? Y a esto os quiero animar en este post, a que sonriamos
siempre porque descubramos el valor de la sonrisa.
Hay distintos tipos de sonrisa,
la sonrisa Duchenne es la más genuina de todas, es la sonrisa en la que movemos
los músculos de la boca pero también el musculo orbicular de los ojos, es la más
auténtica porque es la que se corresponde con la respuesta emocional de la alegría,
se dispara de manera involuntaria como reflejo de esta emoción. Hay numerosos
estudios psicofisiológicos sobre la sonrisa, en todos ellos se demuestra que al
sonreír liberamos endorfinas, que son esas sustancias del cerebro que reducen
la ansiedad y el dolor físico y nos dan la sensación de bienestar. Las
endorfinas nos ayudan a tener una actitud positiva y ese estado mental a su vez
nos predispone a razonar con mayor claridad.
Por el contrario el enfado nos
bloquea mentalmente, nos impide fijarnos en detalles, nos polariza en posturas
de todo/nada que impiden ver los matices, y nos puede llevar hasta el rapto
emocional que es una situación de irracionalidad. Lo bueno del enfado es que se
pasa, sigue una curva normal, por lo que sabemos que con el paso del tiempo el
enfado tiende a disminuir. Esto es muy útil saberlo a la hora de relacionarnos
con una persona enfadada y para gestionarnos a nosotros mismos, espera un poco
a que se te pase el enfado, no tomes esa decisión en caliente, ni tengas esa
conversación en la parte alta de tu curva del enfado porque posiblemente digas
cosas de las que después te arrepientas.
La sonrisa tiene también un
efecto emocional sobre los demás, es contagiosa, tiene un efecto multiplicador
y genera actitudes positivas de los demás hacia nosotros, facilita la
comunicación y además ilumina el rostro y resalta la belleza. Todo son ventajas
al sonreír, ¡y no me vengas a chafar con las patas de gallo! Son líneas de
expresión, y benditas arrugas sin son las marcas que deja una vida feliz.
Otra sonrisa que me viene a la
cabeza, porque pude verla en persona recientemente, fue la de Jaume Sanllorente,
el fundador de la ONG “Sonrisas de Bombay”, sonrisa Duchenne donde las haya,
pegadiza y contagiosa, y es que la sonrisa tiene el poder de convencer, de
animar, de facilitar… El total convencimiento de Jaume de que cada persona es
valiosa en sí misma y digna de ser regalada con una sonrisa, le lleva además de
a sonreír a ser un gran comunicador, entusiasta, líder y emprendedor.
¿Porque no sonreímos más? Me lo
pregunto a mí misma también.
Todos tenemos preocupaciones,
agobios, fallos… pero también todos tenemos alegrías, éxitos, motivos de
agradecimiento… creo que es cuestión de fijarnos más en lo positivo, con
esfuerzo, porque por tendencia natural solemos poner la atención sobre lo
negativo, así somos. Del pensamiento positivo a la sonrisa, pero también de la
sonrisa al pensamiento positivo, que ambos tienen la capacidad de ser causa y
efecto, sonríe más y veras los efectos en ti mismo y a tu alrededor.
¡Sonríe, es gratis! Dan ganas de ponerlo en
vallas publicitarias por toda la ciudad, de fondo de pantalla, de estado del
Whatsapp… aunque ahora sabemos, espero haberte convencido, que el mejor modo de
propagar este mensaje es contagiando nuestra sonrisa a nuestro alrededor, podría
ser una nueva revolución ¿lo intentamos?
Almudena Gutierrez Merelles
Me encanta leerte Almu, muchas gracias!! Tu compi de clase!!
ResponderEliminarEnhorabuena blogeros! muy buen post y muy buen topic.
ResponderEliminarGran tema, la sonrisa, para cuántas cosas vale... es fundamental para dar ese toque irónico necesario cuando quieres que el mensaje cale.
Lo dicho, enhorabuena a los autores y que podamos seguir leyendo más post.
FG
¡Gracias Almu! ¡Te mando una sonrisa! :)
ResponderEliminarJejeje Sonríe!! que es gratis!
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo y a favor de la revolución por la sonrisa.Habéis probado a sonreír por la calle a la gente sin conocerla?? Prueba y ya me contaras. Imagínate cuando te conocen.
ResponderEliminarNumber 4